Actualizado el 18 de diciembre de 2024 por Carlos José Belmonte López
La obesidad es una enfermedad compleja que afecta a un 22% de la población en España. Sin embargo, su comprensión generalmente se limita a la mera alimentación y ejercicio físico. Este problema no se puede reducir a una falta de autocontrol o a hábitos poco saludables. En el Día de la Lucha Contra la Obesidad, expertos en salud se reunieron para subrayar que la obesidad está condicionada por factores genéticos, biológicos y ambientales que, en muchos casos, escapan al control del individuo.
Las raíces de la obesidad: más allá de la dieta y el ejercicio
Irene Bretón, coordinadora del Área de Obesidad de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), enfatizó la multifactorialidad de la enfermedad, señalando que hábitos de vida poco saludables pueden desregular el funcionamiento natural de nuestros genes. “No es tan sencillo como comer sano y hacer ejercicio; el mecanismo genético puede ya estar alterado”, afirmó. Esta es una realidad que muchas personas no comprenden, lo que contribuye a un ciclo de culpa y vergüenza.
El coordinador de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), Albert Lecube, también hizo hincapié en que la obesidad es un «gatillo fácil para fomentar la discriminación y la estigmatización». Los pacientes, en muchos casos, se sienten responsabilizados por su condición. Esta percepción no solo genera malestar emocional, sino que también dificulta la identificación y el tratamiento adecuado de la enfermedad. “La obesidad no es simplemente un problema de voluntad”, recordó Lecube, subrayando que el infradiagnóstico y la minusvaloración pueden llevar a un mal manejo clínico.
Un enfoque integral para una enfermedad compleja
Los valores de atención médica integrativa se ponen de manifiesto en el tratamiento de la obesidad. Se subraya la importancia de un enfoque multidisciplinar que involucre a médicos, administraciones públicas y la sociedad en general. “La obesidad se debe abordar con la participación de distintos actores”, indicó Bretón, además de señalar que las asociaciones de pacientes son esenciales en este proceso. Junto con el apoyo profesional, estas organizaciones ofrecen el factor emocional y humano que los pacientes a menudo requieren para lidiar con su condición.
Andoni Lorenzo, presidente del Foro Español de Pacientes, aportó un dato revelador: el 54% de la población padece alguna patología crónica, lo que significa que muchas personas convivirán con la obesidad durante toda su vida. La interacción entre las asociaciones de pacientes y los profesionales de la salud es fundamental, ya que un paciente que forma parte de una comunidad solidaria tiende a involucrarse más en su tratamiento.
Sin embargo, el camino hacia esa integración no es sencillo. La estigmatización de las personas con obesidad persiste, lo que dificulta la formación de redes de apoyo. “La exposición pública a menudo se traduce en discriminación y burlas, lo que desanima a los pacientes de participar en asociaciones”, dijo Lecube. Esta situación refuerza la necesidad de una mayor sensibilización social respecto a las causas y consecuencias de la obesidad, promoviendo una visión más empática y comprensiva.
Rompiendo el estigma y promoviendo el conocimiento
El estigma social puede ser una barrera significativa para el tratamiento adecuado de la obesidad. A menudo, quienes la padecen se sienten juzgados y menospreciados, lo que agrava su situación emocional y física. La falta de comprensión sobre la naturaleza multifacética de la obesidad contribuye a que las personas afectadas se sientan solas en su lucha. Como resultado, los expertos instan a la sociedad en general a adquirir más conocimiento sobre esta enfermedad y a adoptar actitudes más inclusivas.
Con la meta de erradicar el estigma, se hace hincapié en la importancia de la educación y la sensibilización pública. Una sociedad informada puede contribuir a crear entornos más comprensivos, donde los pacientes se sientan apoyados y motivados en su proceso de búsqueda de salud.
En conclusión, la obesidad es un problema de salud que exige una atención más consciente y compasiva. La colaboración entre profesionales de la salud, administraciones y asociaciones de pacientes es fundamental para lograr una mejor calidad de vida para quienes la sufren. La clave está en reconocer que la salud va más allá de simples elecciones personales, y que cada individuo merece empatía y apoyo en su camino hacia el bienestar.