Actualizado el 12 de febrero de 2025 por Carlos José Belmonte López
Cuando empezamos a explorar el mundo de los suplementos alimenticios, es común sentirse abrumado por la variedad y la complejidad del tema. A menudo, asumimos que una dieta saludable y equilibrada, como la dieta mediterránea, proporciona todos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita. Sin embargo, controlar cada uno de estos nutrientes puede ser un objetivo poco realista en la vida diaria. Aquí es donde los complementos pueden jugar un papel importante, ayudando a cerrar las brechas nutricionales.
Decidiendo qué suplementos son realmente necesarios
Para tomar decisiones informadas sobre qué suplementos incorporar a nuestra rutina, el cardiólogo Aurelio Rojas ha compartido en sus redes sociales una lista de los cuatro suplementos que, según él, son realmente fundamentales. Con un enfoque basado en evidencia científica, Rojas establece que no es necesario contar con una extensa colección de productos; en cambio, se pueden obtener resultados significativos a partir de unos pocos.
Suplementos para un corazón y cerebro saludables
Los cuatro suplementos recomendados están respaldados por estudios que demuestran que son nutrientes a menudo deficitarios en la población y que ofrecen beneficios comprobados para el corazón, el cerebro y los niveles de energía. Tal y como indica Rojas, «Tu salud no necesita un cajón lleno de pastillas, necesita las correctas». Esta afirmación resuena en el contexto actual donde la búsqueda de soluciones simples y efectivas es previo en la mente de consumidores informados.
Omega-3: el aliado del cerebro y el corazón
El primer suplemento que Rojas destaca es el omega-3, conocido por sus propiedades antiinflamatorias y su papel en la salud neuronal. Este ácido graso poliinsaturado, que se encuentra en abundancia en pescados azules como el salmón y las sardinas, es fundamental para combatir la inflamación vascular y promover una adecuada regulación del colesterol en sangre. Los expertos advierten que lo ideal es obtener omega-3 de fuentes alimenticias, ya que este enfoque garantiza la adquisición de múltiples nutrientes a la vez, resultando también más económico.
Vitaminas del grupo B: esenciales para el bienestar
Después del omega-3, el cardiólogo se enfoca en los complementos vitamínicos del grupo B, particularmente aquellos considerados «metilados». Estas vitaminas no solo estimulan la concentración y vitalidad, sino que son fundamentales para una amplia gama de funciones en el organismo. Aunque el cuerpo necesita cantidades pequeñas de estas vitaminas, su importancia no puede subestimarse. La deficiencia de vitaminas B, como la B12 y B2, está asociada a diversas enfermedades, lo que resalta la necesidad de mantener una dieta variada que, además de carnes, incluya cereales integrales, lácteos y legumbres.
Magnesio: el mineral del bienestar
Otro suplemento que ha ganado popularidad es el magnesio, un mineral relacionado con el descanso, la energía, el manejo del estrés y la salud cognitiva. Aurelio Rojas comparte que toma magnesio todos los días antes de acostarse, pero advierte que no todos los tipos de magnesio son iguales. Específicamente, recomienda el bisglicinato de magnesio, que se absorbe más eficientemente y favorece una mejor calidad de sueño. Además, un aumento en la ingesta de magnesio podría mejorar la cognición y ofrecer cierta protección contra la demencia, un dato que refuerza su valor en la dieta diaria.
Vitamina D3 y K2: un dúo para la salud ósea y cardiovascular
Por último, Rojas menciona un complemento que combina dos tipos de vitaminas: D3 y K2. Este dúo no solo es esencial para mantener huesos fuertes, sino que también juega un papel crucial en la salud del corazón y el sistema inmune. La vitamina D3 es conocida por su función en la absorción de calcio, mientras que la vitamina K2 se suma a su efecto, promoviendo la correcta utilización de este mineral en el organismo.
Conclusión: la importancia de una dieta equilibrada
En resumen, aunque los suplementos alimenticios pueden desempeñar un papel importante en la salud, no sustituyen la importancia de una dieta equilibrada. Incorporar alimentos ricos en omega-3, vitaminas del grupo B, magnesio, y las combinaciones de vitaminas D3 y K2 es fundamental para asegurar un aporte nutricional adecuado. La clave está en informarse adecuadamente y consultar a profesionales de la salud antes de comenzar a incorporar cualquier suplemento a nuestra rutina diaria. Así, podremos asegurar que nuestras elecciones apoyen de manera efectiva nuestra salud y bienestar a largo plazo.