Actualizado el 11 de diciembre de 2024 por Carlos José Belmonte López
Cuidarse a uno mismo es uno de los mayores deberes que tenemos en la vida. Solo así conseguiremos tener un camino largo y que este sea lo más placentero posible. Y es que es clave respetar una serie de pautas y seguir una serie de consejos para proteger nuestro organismo y mantenernos saludables. Y el más importante de todos ellos es, sin duda alguna, llevar una alimentación sana y equilibrada.
La alarmante situación del sobrepeso en España
Además, existe una tendencia que preocupa a los expertos y es que siguen existiendo niveles de sobrepeso en la sociedad por encima de los deseados. En España, 4 de cada 10 personas se encuentran por encima de su peso idóneo e incluso casi un 20% de la sociedad padece obesidad.
Impacto en la salud de diferentes grupos de edad
Esta situación es especialmente grave si estudiamos con detenimiento alguna franja de edad. Sobre todo los niños, ya que estos índices no paran de crecer. Tal y como destaca la Cadena COPE, más de la mitad de los españoles sufría alguna enfermedad crónica en el año 2021.
Muchas de ellas además son de naturaleza cardiovascular o están relacionadas con procesos como la diabetes. Además, el número de personas jóvenes con cáncer también es cada vez mayor. Todos estos datos evidencian, entre otras muchas cosas, que todo se puede hacer mejor desde el punto de vista de la alimentación.
Relación entre la alimentación y la salud mental
Otra cuestión similar a esta es el aumento en la aparición de tumores, convertida en una de las causas de muerte más repetidas. En paralelo, se han disparado los casos de depresión y ansiedad entre la ciudadanía. Problemas a los que se podría poner un principio de solución si conseguimos llevar una alimentación más sana y equilibrada.
¿Cómo evitar el sobrepeso y la obesidad?
El sobrepeso y la obesidad son fenómenos que afectan de manera muy importante a la población. Por eso, muchos expertos se encuentran enormemente preocupados por esta situación. Una de estas especialistas que alza la voz ante este mal de la sociedad es Cristina Porca.
Esta nutricionista y colaboradora del programa Herrera en COPE ha narrado cuál es el problema real que vive España ante la tendencia creciente del sobrepeso. Especialmente en los más pequeños, un sector que lleva una alimentación cada vez peor. «El 33% tiene tanto sobrepeso como obesidad». Estas cifras son alarmantes y requieren de una intervención urgente.
La influencia de la gastronomía estadounidense
La especialista identifica que la influencia de la mala gastronomía estadounidense es uno de los motivos que han llevado a los españoles a comer de manera insalubre. Platos que nos permiten ir más rápido en una vida ajetreada y sin tiempo son algo de lo que deberíamos huir. «Fue una necesidad que apareció en épocas de hambre en Estados Unidos y había necesidad de aportar calorías, sin mirar si era sano o no. Se tiró a los ultraprocesados». Y España, por circunstancias diferentes, ha adoptado este estilo de vida generando estragos en la sociedad.
La responsabilidad del consumidor
Además, Cristina Porca hace hincapié en que deberíamos preocuparnos más por lo que comemos y por lo que compramos en los supermercados. Saber leer las etiquetas de los productos es fundamental. «Aquí hay aditivos que, si no están prohibidos, marcan que pueden ser perjudiciales para la salud. En alimentos comunes, es importante que tengamos en cuenta el etiquetado». Al comprender estos avisos, podemos evitar productos nocivos para nuestra salud.
El peligro de la tartrazina y otros aditivos
Uno de los componentes que la especialista pide evitar es la tartrazina, un colorante muy habitual en muchos alimentos que encontramos en el supermercado. «Hace que el alimento sea más atractivo. Es un polvo que hace que ese producto tenga un color vistoso que nos llama a comprarlo».
Este colorante es muy típico en productos como nachos o doritos envasados, pero también está presente en cereales, caldos de pollo, maíz envasado, yogures, frutos secos e incluso en algunos panes. «El riesgo radica en los problemas que genera a nivel de enfermedades cardiovasculares o su potencial cancerígeno, además de crear dependencia hacia los alimentos. El problema no es solo ese efecto, sino el efecto adictivo que produce». Por ello, es crucial leer bien las etiquetas y comprender la información nutricional de lo que compramos.
«Lo encontramos por la facilidad en la forma de cocinado o porque mantiene más el sabor. Entramos en palabras mayores cuando lo encontramos en productos que nos venden como sanos, pero que no lo son». Ahí reside el principal peligro de este colorante y otros aditivos similares. Es importante que, como consumidores, tomemos decisiones informadas para cuidar nuestra salud.