¿Qué es la Adrenalina y para qué se utiliza?

Actualizado el 23 de octubre de 2022 por Carlos José Belmonte López

A la adrenalina siempre se la asocia con el peligro. Y con justa razón, debido a que esta hormona se produce en las glándulas suprarrenales y es liberada en situaciones de estrés y excitación, por lo que contribuye a la activación del cuerpo a nivel físico y psicológico en situaciones donde se amerita estar alerta.

La liberación de adrenalina, en su justa medida, repercute positivamente en el organismo, es por eso que tantas personas la utilizan en su forma sintética en la práctica deportiva.

Ahora bien, ¿qué funciones cumple la adrenalina como medicamento? Será interesante conocer cómo trabaja esta hormona y sus aplicaciones en el campo de la medicina.

¿Qué es la adrenalina?

Según la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica, “la adrenalina, también conocida como epinefrina, es una hormona que produce el organismo de forma natural a través de las glándulas suprarrenales, localizadas encima de los riñones. En situaciones de estrés, alarma, miedo, peligro o incluso excitación, el organismo libera esta sustancia para poder enfrentarse a situaciones de riesgo”.

De forma natural, la liberación de adrenalina, que es tanto una hormona como un neurotransmisor, influye positivamente en el bienestar del organismo, porque activa el sistema circulatorio, aumenta la tensión arterial, mejora la capacidad del sistema respiratorio al dilatar los bronquios y estimula la producción de dopamina. 

Gracias a estas propiedades, la adrenalina puede ser sintetizada como medicamento para emplearse en el tratamiento de reacciones alérgicas y asmáticas graves, la parada cardiorrespiratoria, la septicemia y hemorragias superficiales abundantes.

¿Por qué la adrenalina es una hormona y un neurotransmisor?

La adrenalina es una hormona porque es una sustancia química secretada por una glándula que alcanza los órganos en los que actúa a través de la sangre. 

Se cumple esa máxima de las hormonas, porque la adrenalina es sintetizada por la médula de las glándulas suprarrenales y cuando la zona del hipotálamo en el cerebro recibe un estímulo para activar nuestro cuerpo, por ejemplo, cuando se desea practicar un deporte, huir de un agresor o defenderse en una situación de riesgo, se da la orden a las glándulas suprarrenales de liberarla en el torrente sanguíneo.

La sangre se encarga de llevar la adrenalina por todo el cuerpo para que interactúe con órganos que contienen receptores adrenérgicos. Al darse la unión de la adrenalina con estos receptores, se producen cambios bioquímicos en el interior de las células de los diferentes órganos.

Por otro lado, es un neurotransmisor porque es capaz de transmitir un impulso nervioso de una neurona a otra. Existen neuronas que utilizan adrenalina en el hipotálamo y en el tronco encefálico, estas neuronas están relacionadas con el control central de la presión arterial y con la integración de estímulos para lograr una respuesta emocional cónsona con distintas situaciones.

¿Para qué se utiliza la adrenalina?

La adrenalina es un medicamento perteneciente a la familia de las aminas simpaticomiméticas, se distingue por su poder vasoconstrictor, su capacidad de aumentar la fuerza del latido cardíaco, incrementar la frecuencia cardíaca, así como por su acción broncodilatadora e hiperglucemiante. 

Por eso es utilizada en caso de shock, cuando hay una caída de la tensión arterial, también en crisis asmáticas, por su efecto broncodilatador; y en casos de parada cardíaca, ya que estimula los latidos del corazón. 

A continuación, se detallan algunos de los usos médicos de la epinefrina. 

Anafilaxia en los niños

El empleo de adrenalina está destinado a resolver situaciones de reacción alérgica grave que se conoce como anafilaxia, donde convergen distintos síntomas como urticaria, crisis de asma, rinitis, conjuntivitis, dolor abdominal, vómitos, hipotensión e incluso pérdida de conciencia, lo que pone en peligro la vida de un niño. 

Esto puede ocurrir por reacciones a los alimentos, los medicamentos, las picaduras de abejas, o la exposición a una alta concentración de alérgenos ambientales. En estos casos el uso de adrenalina, por su efecto broncodilatador y antiinflamatorio, puede salvar la vida del niño.

Una vez que se administra la adrenalina en un niño con anafilaxia, se empieza a notar palpitaciones, ya que su corazón se acelera, se le sube la tensión, se le dilatan los bronquios permitiéndole una mejor respiración, y se reduce la inflamación de forma rápida. 

Maniobras de resucitación cardiopulmonar

La epinefrina inyectable es un fármaco esencial para realizar maniobras de resucitación cardiopulmonar, tales como:

  • Paro cardíaco. El cual se puede producir por un infarto de miocardio.
  • Colapso circulatorio agudo. Cuando se produce la pérdida brusca de la circulación sanguínea eficaz a causa de una bradicardia, una disminución brusca del tono de los vasos sanguíneos o pérdida abundante de sangre.

Anestesia

La anestesia inyectable, como la lidocaína y la artecaína, se combina con  epinefrina para controlar la zona en la que la anestesia es activa, y debido a que genera vasoconstricción local, dificulta que la sangre se lleve la anestesia y permite que la anestesia permanezca durante más tiempo en el sitio donde fue aplicada.

Medicamentos para el sangrado nasal

Algunos fármacos para detener el sangrado nasal contienen adrenalina, para aprovechar su efecto vasoconstrictor que contribuye a cerrar los vasos sanguíneos que se han roto y disminuir de esta forma la pérdida de sangre.

Problemas oculares

El efecto dilatador sobre la pupila del ojo que produce la adrenalina se aprovechó para diseñar colirios para el tratamiento del glaucoma de ángulo abierto y la hipertensión ocular, que se emplearon por mucho tiempo.

Actualmente la adrenalina se utiliza en algunas cirugías intraoculares para fijar la pupila durante el procedimiento.

Contraindicaciones y efectos adversos de la adrenalina

La epinefrina no se debe administrar sin la autorización de un médico. Algunas de sus contraindicaciones y efectos adversos son estos:

  • No deben usarla los que presenten alergia a este medicamento o a cualquiera de las aminas simpaticomiméticas. 
  • No se debe usar en pacientes con insuficiencia cardíaca, aterosclerosis cerebral y glaucoma de ángulo cerrado.
  • El uso de adrenalina puede causar vasoconstricción periférica, hipertensión, hemorragia cerebral, edema pulmonar, taquicardia, arritmia cardiaca, angina de pecho y palpitaciones. 
  • El exceso de adrenalina tiene consecuencias desagradables como estrés crónico, cefaleas, ansiedad, náuseas, mareos, insomnio, problemas de visión temporales, irritabilidad y problemas cardíacos.

Las reacciones coordinadas que produce la adrenalina, permiten que todos nuestros órganos se activen con el fin de aumentar la capacidad de movimiento, facilitar la huida o la defensa contra atacantes, ¡es sin duda un mecanismo de defensa natural rápido y eficiente!

German Fuertes Otero
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CEO en PharmaSalud.net. Licenciado en medicina por la Stanford Medicine: Stanford, California, US, Máster en University of Cambridge: Cambridge, Cambridgeshire, GB y University of Oxford: Oxford, Oxfordshire, GB. Doctorado en Harvard University Harvard Catalyst: Cambridge, MA, US

Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios y la información contenida en PharmaSalud esté redactada por profesionales en medicina, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.

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