Actualizado el 23 de octubre de 2022 por Carlos José Belmonte López
Aunque es cierto que las enfermedades causadas por parásitos son más frecuentes en algunos países subdesarrollados, la realidad es que en cualquier parte del mundo pueden aparecer. De allí la importancia de contar con buenos medicamentos, capaces de controlar y eliminar el problema de raíz. Uno de estos es el albendazol.
En este artículo señalaremos de qué se trata este medicamento, como se obtiene y, sobre todo, cuáles son las medidas a tomar al momento de usarlo.
¿Qué es albendazol?
- Fórmula: C12H15N3O2S
- Masa molar: 265,333 g/mol
- Número CAS: 54965-21-8
- Nombre comercial: Zentel, Colidetol
- Metabolismo: Oxidación de átomo de azufre formando metabolito activo sulfóxido
- Estado legal: Legal
- Cat. embarazo: D
El albendazol es un antiparasitario que se ha colocado en la categoría de los benzimidazoles. Su uso está indicado ante la presencia de algunos agentes dañinos comunes, como cestodos, nematodos, entre otros.
Dado que es un compuesto químico, se puede obtener en un laboratorio. Su fórmula química es C12H15N3O2S. Además de albendazol, se puede obtener bajo el nombre de Zentel, Digezanol.
Su uso está enfocado principalmente a países donde abunda la pobreza, y donde las condiciones de salud son precarias, como África. Gracias a los esfuerzos de la OMS y otras instituciones dedicadas a la salud, se ha podido proteger la salud de muchas personas haciendo uso del albendazol.
Es conocido como un antihelmíntico. También es el principal medicamento ante diferentes enfermedades originadas por parásitos y larvas.
Uso de albendazol
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU, el albendazol puede ser usado para eliminar parásitos comunes en el cuerpo humano como la giardiasis. También ante los provenientes de animales, como el perro o el cerdo.
La función del albendazol es esencial para eliminar los parásitos del organismo. Este fármaco ataca la fuente principal de energía de la cual se alimentan los parásitos. Esto permite que en muy poco tiempo se debilite y muera. Gracias a su intervención, también se limita el crecimiento de otros parásitos que se encuentran en forma de larvas.
La presentación del albendazol es en comprimidos o suspensión. La dosis a ingerir dependerá de varios factores, como el parásito que está causando el malestar así como la presentación del medicamento elegido. De todas maneras, la farmacéutica Mafalda Abreu, miembro del Colegio de Farmacéuticos de Portugal señala las siguientes cantidades.
- Mayoría de los parásitos. La dosis diaria es de 400 mg durante un máximo de 5 días. Esto solo es aplicable a niños menores de 12 años. En adultos puede variar.
- Opisthorchis viverrini. Siempre y cuando la persona tenga 2 años o más, se debe administrar 800 mg diarios, por un máximo de 3 días.
- Larvas. La dosis recomendada es de 400 mg por día. El tratamiento no debe pasar de los 3 días de duración.
La duración del tratamiento podría extenderse por mucho más tiempo, un mes incluso, cuando se trate de enfermedades específicas, como la hidatidosis quística. Una vez cumplido el periodo de tratamiento prescrito por el médico, es necesaria una visita al mismo para la evaluación correspondiente.
Precauciones al usar albendazol
Es importante conocer las precauciones a tomar en cuenta al usar albendazol. De esa manera se correrá el menor riesgo posible al usarlo. Prestemos atención a las recomendaciones hechas por la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Prescripción médica
La eficacia del albendazol está completamente comprobada por las diferentes instituciones de salud, lo que hace seguro su uso. No obstante, siempre es bueno contar con una recomendación médica, sobre todo si se desconoce cuál es el parásito que está causando la afección.
Todos deben seguir el tratamiento
Aunque es posible que solo uno presente los síntomas, es necesario que todas las personas cercanas usen el medicamento. Esto se debe a que, en el caso de algunas personas, los parásitos tardan en crecer un poco más que en otras.
Dosis
Otra de las recomendaciones es no cambiar la dosis prescrita. Un consumo mayor del medicamento podría afectar gravemente algunos órganos del cuerpo, como el hígado o los riñones. Por otra parte, un consumo menor podría no ser suficiente para eliminar los parásitos. También se sugiere tomar albendazol junto con una de las comidas.
Embarazo o riesgo de este
El tratamiento con albendazol no está indicado para embarazadas, por tal razón se debe informar al médico si se encuentra en ese estado. En el caso de que entre los planes del paciente esté quedar embarazada, es necesario esperar hasta terminar el periodo de uso.
Combinación con otros fármacos
El albendazol puede ser usado al mismo tiempo con otros fármacos. Sin embargo, es necesario que sea un especialista en salud quien diseñe el tratamiento. Esto se debe a que algunos medicamentos disminuyen la efectividad del albendazol. Por ejemplo, los antiepilépticos.
También ocurre que algunos aumentan su efecto, tal es el caso de la cimetidina. A menos que el tratamiento a seguir sea de larga duración, es mejor no consumir estos medicamentos al mismo tiempo.
Efectos secundarios del albendazol
La farmacéutica Mafalda Abreu destaca además los síntomas que se pueden originar al consumir albendazol. Estos concuerdan con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos. Son los siguientes.
- Dolor. Puede presentarse en la zona del abdomen y la cabeza.
- Malestar general. Puede haber náuseas, fiebre y hasta vértigo.
- Caída de cabello. Esto solo ocurre de manera temporal.
- Diarrea. Es de los síntomas más frecuentes.
- Orina. Puede ser más constante la necesidad de orinar.
- Problemas en la sangre. La coagulación de esta se ve afectada temporalmente.
- Fatiga. Puede llegar a ser extrema, aunque solo por episodios breves.
- Convulsiones. Se trata de un síntoma muy poco frecuente.
¿Para quiénes está contraindicado el albendazol?
Para algunas personas no está permitido hacer uso del albendazol. Esto se debe a que los síntomas secundarios podrían ser mayores al beneficio. Son los siguientes grupos.
- Embarazadas. Debido al fuerte impacto que puede causar al feto, se prohíbe su uso durante este periodo. Lo mismo es aplicable a la lactancia.
- Hipersensibilidad. Si se ha presentado reacciones alérgicas ante el albendazol o uno de sus componentes, no se debe usar.
Desde su aparición, y gracias a la guía médica, se ha podido eliminar una gran cantidad de parásitos con el albendazol. Una herramienta valiosa para todos.