Actualizado el 23 de octubre de 2022 por Carlos José Belmonte López
La ansiedad y los problemas depresivos están a la orden del día. Ciertamente, verse bien por fuera, cuando la persona siente que se está muriendo por dentro, es una experiencia muy desagradable. Afortunadamente, medicamentos ansiolíticos como el alprazolam, hacen más llevadera la vida de las personas con trastornos emocionales.
En farmacias, este fármaco se puede conseguir con receta médica en presentaciones con nombres comerciales como: Tafil, Alpram o Alprax.
Ahora bien, puesto que se trata de un medicamento controlado, es preciso saber cuál es su uso médico aprobado y las precauciones a considerar cuando se utiliza. Precisamente, ese es el objetivo de este artículo.
¿Qué es el Alprazolam?
- Fórmula: C17H13ClN4
- Masa molar: 308,765 g/mol
- Número CAS: 28981-97-7
- Punto de ebullición: 509 °C
- Nombre comercial: Xanax, Niravam, Trankimazin, Tafil
- Vida media: Liberación inmediata: 11.2 horas, Liberación prolongada: 10.7-15.8 horas
- Metabolismo: Hepático, por CYP3A4
El alprazolam o alpram forma parte de los medicamentos llamados benzodiazepinas, que ayudan a disminuir la excitación anormal del cerebro. Se la considera un fármaco tranquilizante.
Este ansiolítico benzodiazepínico de acción corta actúa aumentando la actividad del ácido gamma-aminobutírico, un neurotransmisor inhibidor que se encuentra en el cerebro, al facilitar su unión con el receptor GABA-érgico.
Posee actividad anticonvulsivante, sedante, relajante muscular y amnésica, además tiene propiedades antidepresivas.
¿Para qué sirve el Alprazolam?
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos indica que el alprazolam es un medicamento ansiolítico, el cual es empleado para tratar distintos trastornos depresivos, que cursan con síntomas como ansiedad, tensión, intranquilidad, dificultades de concentración, irritabilidad e insomnio.
Entre las afecciones emocionales para los que los especialistas de salud indican el alpram, se encuentran:
- Trastorno de ansiedad. Caracterizado por preocupación y miedos intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones diarias.
- Trastorno de pánico. Donde los afectados sufren de ataques súbitos e inesperados de miedo intenso y preocupación.
- Agorafobia. La más frecuente de las fobias, que se caracteriza por un intenso y desproporcionado temor al exponerse o anticipar un elevado número de situaciones, puede incluir temor a los espacios abiertos o cerrados.
¿Cómo administrar el Alprazolam?
Tratándose de un medicamento controlado, debe ser recetado por un psiquiatra o médico autorizado. Por otra parte, la dosis la estipulará el especialista, en vista de que, debe adaptarse a cada caso, en función de la gravedad de los síntomas y de la respuesta individual de cada persona.
El alprazolam se puede conseguir en forma de tabletas, tabletas de liberación prolongada, tabletas de desintegración oral y una solución concentrada para tomar por vía oral.
Después de su ingestión, el alprazolam es absorbido de forma rápida y la concentración máxima del medicamento en el organismo ocurre alrededor de 1 a 2 horas después de su administración.
¿Cuáles son las dosis recomendadas de Alprazolam?
Es muy probable que el médico indique iniciar con dosis bajas de alprazolam e incrementarse gradualmente.
En sentido general, la dosis inicial recomendada para el tratamiento de los trastornos de ansiedad es de 0,25 mg a 0,5 mg, 3 veces al día. La dosis de mantenimiento es de 0,5 mg a 4 mg al día, administrados en varias tomas.
Para el tratamiento de los trastornos del pánico, la dosis inicial es de 0,5 mg a 1 mg antes de dormir o 0,5 mg, 3 veces al día. Mientras que, la dosis de mantenimiento se ajusta dependiendo de la respuesta de la persona al tratamiento.
La tableta de desintegración oral y la solución concentrada generalmente se toman de dos a cuatro veces al día. La tableta de liberación prolongada se toma una vez al día, preferiblemente por la mañana.
Para tomar el líquido concentrado, se usa el gotero que viene con la receta, succionando con este la cantidad prescrita y derramándose sobre alimentos líquidos o semisólidos como agua, jugos, compotas de manzana o pudín, para luego revolverlo unos segundos, a fin de que se mezcle totalmente.
Ventajas y desventajas del Alprazolam
Aunque el empleo del alprazolam ha resultado beneficioso para el tratamiento de ciertos problemas depresivos, nunca debe administrarse sin el consentimiento escrito de un médico.
Sin duda alguna, conocer las ventajas y desventajas del alprazolam contribuirá a que se le dé un uso consciente y se minimice la posibilidad de sufrir efectos indeseados.
Ventajas del alprazolam
- Ha demostrado su efectividad para tratar el trastorno de pánico.
- Ha sido útil en la atención de trastornos de ansiedad.
- Forma parte de los medicamentos indicados para tratar la agorafobia.
- Puede conseguirse en la mayoría de las farmacias.
- Se puede encontrar en varias presentaciones comerciales.
Desventajas del alprazolam
- Es un medicamento de uso delicado, que solo puede ser usado bajo estricta vigilancia médica.
- Puede ocasionar somnolencia e impedir la realización normal de las actividades cotidianas.
Precauciones al utilizar el alprazolam
Con relación al empleo del alprazolam o alpram, estas son algunas de las precauciones a considerar:
- Aunque en ocasiones puede utilizarse para tratar la depresión, no está recomendado solo, pues puede agravar el cuadro clínico; esto es especialmente importante en el caso de personas con tendencias suicidas.
- Al tomar alprazolam debe evitarse la realización de actividades de riesgo o que exijan un estado de alerta total, como por ejemplo manejar u operar maquinarias, ya que puede generar somnolencia.
- Debe evitarse el consumo de alcohol durante el tratamiento con alprazolam, pues esta sustancia puede incrementar el riesgo de efectos secundarios, como mareos, aturdimiento, somnolencia extrema o dificultad de respiración.
- No se aconseja emplearla en el embarazo o en el período de lactancia.
- Antes de iniciar el tratamiento, lo mejor es notificar al médico las medicinas que se estén empleando, pues algunas pueden interactuar negativamente con el alprazolam.
- Antes de usar alprazolam, hay que informar al especialista de la salud si se padecen enfermedades como glaucoma, también si se ha experimentado convulsiones o afecciones pulmonares, renales o hepáticas.
- Es de suma importancia avisar del uso de alprazolam si la persona se va a someter a cualquier cirugía, incluso dental.
¿Cuáles son los efectos secundarios que podría provocar el alprazolam?
El alprazolam puede producir efectos secundarios, tales como:
- Somnolencia
- Aturdimiento
- Dolor de cabeza
- Cansancio
- Mareos
- Irritabilidad
- Dificultad para concentrarse
- Aumento de salivación
- Náuseas
- Estreñimiento
- Cambios en el apetito
- Cambios en el peso
- Dificultad para orinar
- Dolor de articulaciones
- Dificultad para respirar
- Convulsiones
- Problemas con el lenguaje
- Problemas de coordinación o equilibrio
Definitivamente, este fármaco ansiolítico usado de manera correcta representa un faro de luz para quienes luchan a diario con trastornos depresivos. Sin embargo, es muy importante evitar la automedicación, así como ceñirse estrictamente a las instrucciones médicas.