Actualizado el 23 de octubre de 2022 por Carlos José Belmonte López
El diclofenaco es uno de los antiinflamatorios más usados. Se puede conseguir en cualquier farmacia. Forma parte de los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE).
El uso de antibióticos, antiinflamatorios y analgésicos era casi nulo poco más de siglo atrás. Estos tipos de medicamentos se dieron a conocer hace relativamente pocas décadas. De hecho, sus primeros usos causaban más problemas que alivio.
Con relación al diclofenaco, su uso se considera seguro. A pesar de ello, hay ciertas precauciones y efectos secundarios que conviene saber, con la finalidad de que el fármaco de venta libre no ocasione problemas de salud, sino más bien aporte beneficios.
¿Qué es el diclofenaco?
El diclofenaco es un inhibidor de la ciclooxigenasa de efectividad probada. Pertenece al grupo de AINE (antiinflamatorios no esteroides).
Es ampliamente utilizado para aliviar el dolor y la inflamación, entre las que se destacan dolor en las articulaciones, dolor postoperatorio, dolor por cálculos renales y vesiculares, cólicos menstruales, entre otros.
Hay dos presentaciones de este fármaco: diclofenac sódico y potásico.
Diferencia entre diclofenac sódico y diclofenac potásico
Estos dos fármacos contienen la misma efectividad, pues su base es el diclofenaco. Sin embargo, la diferencia entre uno y otro es la forma en cómo se absorbe en el cuerpo. Por eso, algunos especialistas prefieren el uso de uno sobre el otro.
El diclofenac potásico se absorbe más rápido que el sódico, ya que es soluble en agua. Por lo tanto, si se necesita atender un dolor de forma inmediata, el mejor será el potásico.
Ahora bien, el sódico, al ser de absorción más lenta, desinflama de manera prolongada y efectiva. Se prescribe para tratar el padecimiento de la artritis. Cabe destacar que, generalmente, se recomienda el consumo en dosis bajas.
El diclofenac potásico es mejor que el sódico cuando se trata de dolor agudo, gracias a su tiempo de respuesta rápido.
En cambio, el sódico es el mejor en pacientes con dolencias crónicas, ideal para desinflamar y se puede usar de forma más prolongada.
¿Para cuáles condiciones o enfermedades se prescribe el diclofenaco?
En la farmacia se puede conseguir varias marcas comerciales para el diclofenaco, entre los que se destacan: Zipsor, Zorvolex, Cataflam, Voltaren XR, entre otros. A continuación, indicaremos las principales condiciones que ameritan el uso de este antiinflamatorio.
- Dolor leve o moderado, como el dolor de cabeza o migraña.
- Inflamación y rigidez por la artritis reumatoide.
- Artrosis.
- Gota en fase aguda.
- Espondilitis anquilosante.
- Lumbalgia
- Dolores menstruales.
¿Cómo se usa el diclofenaco?
Este fármaco de propiedades antipiréticas, además de venir en dos tipos de clasificación, a saber potásico o sódico, también viene en distintos formatos o vías de administración. A continuación, indicaremos las principales formas de uso.
- Vía oral. En esta presentación hay cápsulas, comprimidos dispersables, comprimidos, cápsulas y comprimidos de acción retardada. También polvo para mezclar con agua.
- Intramuscular. Hay ampollas en las que el efecto tiende a hacerse rápido, aunque se recomienda continuar con el tratamiento de forma oral.
- Rectal. Hay supositorios.
- Tópica en la piel. Se trata de una presentación en gel Este formato es de venta libre y se aplica para aliviar el dolor en las rodillas y otras zonas articulares.
Contraindicaciones y precauciones del diclofenaco
Este fármaco se considera seguro. No obstante, hay que tomar ciertas precauciones a fin de que no cause daño.
- Embarazo. Las mujeres en estado de gestación no deben consumir o usar ninguna de las presentaciones de diclofenaco. Puede causar daños serios al feto. No debe usarse durante la lactancia.
- Pacientes con patología cardiovascular. Quienes sufren de cardiopatía isquémica, enfermedad arterial periférica o enfermedad cerebrovascular, no deben usar este medicamento.
- Infertilidad en mujeres. Si se está planificando tener un bebé, no se debe consumir este medicamento, ya que algunos estudios científicos aseguran que disminuye la fertilidad en las mujeres.
- Uso tópico. El uso de este medicamento de forma tópica es delicado. Se debe evitar exponer la zona tratada a la exposición solar o lámparas de bronceado. El diclofenaco puede volver esa área de la piel muy sensible.
- Protección solar. No se debe usar lociones o cremas solares después de aplicar el diclofenaco tópico.
- Duración del tratamiento. Este fármaco es de uso delicado, especialmente para pacientes con riesgo cardiovascular. Por tanto, se debe usar por poco tiempo y en dosis bajas.
- Alérgicos. Los pacientes que son alérgicos a cualquiera de los componentes no deben consumirlo.
Hay que considerar que, una sobredosis del mismo o uso indebido puede provocar problemas cardiovasculares. En tal sentido, los pacientes que sufren de hipertensión pueden usarlo pero no de forma prolongada y en dosis mínimas. Claro, quienes tienen patología cardiovascular grave deben consultar con el médico para que pondere los riesgos y posibles beneficios.
Efectos secundarios del diclofenaco
Como todo medicamento, hay un riesgo de padecer efectos secundarios tras la toma o uso del mismo. Ahora bien, estos efectos secundarios pueden ser leves a graves. En caso de presentar efectos secundarios graves, suspende su uso y dirígete a un centro hospitalario cercano.
Efectos secundarios leves
- Un pequeño zumbido en los oídos.
- Diarrea o estreñimiento.
- Jaqueca o dolor de cabeza.
- Gases o distensión abdominal
- Mareos.
Efecto secundarios graves
- Cansancio excesivo, falta de energía.
- Pérdida de apetito o aumento de peso sin razón aparente.
- Dificultad para respirar, ritmo cardíaco rápido.
- Ampollas, urticaria, sarpullido
- Piel pálida
- Orina turbia, decolorada o con sangre
Si se experimentan estos efectos es necesario acudir al médico. Si se presenta otro efecto adverso que no está expuesto aquí, será necesario consultar con el especialista.
En definitiva, aunque este medicamento es de venta libre en muchas farmacias, podemos destacar que en ciertas patologías requieren de una prescripción médica. Al mismo tiempo, es necesario estar atento a los efectos adversos a fin de evaluar si los beneficios superan los riesgos.
Hay que recordar que, ante cualquier duda, lo mejor es consultar con el especialista o leer con detenimiento el prospecto del diclofenaco.