Actualizado el 23 de octubre de 2022 por Carlos José Belmonte López
El cuerpo humano trabaja de manera compleja pero al mismo tiempo de forma lógica. Esto quiere decir que es posible analizar su comportamiento ante diferentes circunstancias. Una de ellas es cuando presenta déficit en alguna vitamina o mineral. En estos casos, es muy difícil que no se vea afectado. Pensemos, por ejemplo, en la vitamina D.
Si hay déficit de vitamina D, el cuerpo lo manifestará. En este artículo hablaremos de este punto. También veremos la mejor forma de combatir este problema.
¿Qué es déficit de vitamina D?
Tener déficit de vitamina D no es más que no tener la cantidad adecuada en el cuerpo. El organismo necesita de una cantidad mínima por día. Dado que esta vitamina es la encargada de procesar el calcio, y que el cuerpo pueda asimilarlo y usarlo, entonces la deficiencia del mismo puede traer consecuencias nada agradables.
La vitamina D está presente en muchos alimentos, e incluso se puede conseguir a través de algunos medicamentos. Gracias a todos estos, se puede cumplir con la cantidad aprobada por los expertos en medicina.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, destaca la dosis que cada persona debe consumir. Estas cantidades son por día.
- 400 UI. Para quienes tienen 1 año o menos.
- 600 UI. Es la cantidad para quienes son mayores de 1 año pero menores de 70.
- 800 UI. Cuando una persona supera los 70 años, debe consumir más calcio, por eso se prescribe esta cantidad como dosis diaria.
Lo mismo es aplicable para las personas con circunstancias especiales, como las embarazadas o quienes tienen problemas para procesar bien esta vitamina.
Causas del déficit de vitamina D
La incapacidad del cuerpo de procesar la vitamina D de los alimentos, afección que puede tener diferentes orígenes, es una de las causas más comunes de deficiencia de esta vitamina en el organismo. Mayo Clinic, página web con información confiable en temas médicos señala, otras causas frecuentes de este mal.
- Mala alimentación. Aunque algunas personas comen grandes cantidades, no logran tener la dosis diaria de vitamina D porque no usan los alimentos adecuados.
- Falta de luz solar. Quienes pasan demasiado tiempo en casa o en lugares cerrados, con iluminación artificial, no reciben la vitamina D que provee el sol.
- Problemas renales. El cuerpo debe recibir y procesar la vitamina D, si no logra hacer ninguna de las dos cosas, es imposible que pueda hacer uso de ella.
- Uso de medicamentos. Algunos fármacos actúan en el cuerpo limitando la cantidad de vitamina D. Si esto ocurre de manera continua, se crea un problema serio.
Síntomas del déficit de vitamina D
Cualquier persona está en riesgo de padecer déficit de vitamina D, siendo los adultos mayores y los recién nacidos los más propensos a ello. En todo caso, los síntomas asociados a la deficiencia de vitamina D en el cuerpo pueden servir de alerta. La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos destaca los problemas en los huesos como el más frecuente.
Esto se debe a que la vitamina D es la responsable de ayudar en la asimilación del calcio. Y ambos componentes son esenciales para la formación y fortalecimiento de la estructura ósea. Por lo que, si no hay suficiente vitamina D, todos los huesos se pueden ver afectados.
En el caso de algunas personas esto significa que su cuerpo se debilita, haciéndolos más propensos a lesiones y fracturas. También es posible que, aunque no se rompan, sí pierden gran parte de su fuerza física, haciendo de la fatiga un problema frecuente.
Otras afecciones que pueden ser originadas en los huesos es el raquitismo, siendo este un padecimiento que aparece sobre todo en los niños. Cada uno de estos problemas vienen acompañados con síntomas similares, siendo el dolor en los huesos y articulaciones uno de los más comunes.
Tratamiento para el déficit de vitamina D
Si alguno de los síntomas antes mencionados se presenta es vital acudir a un centro de salud. Ellos están preparados para solucionar el problema. Aunque es cierto que puede tomar cierto tiempo, existen algunos tratamientos que permiten la recuperación total del paciente.
En personas con grave déficit de vitamina D
El estudio Diagnóstico y tratamiento de la deficiencia de vitamina D, señala algunas medidas que se deben tomar. Cuando el problema es muy grave, se deben aplicar altas dosis de vitamina D a la persona. Las cantidades pueden superar los 1000 UI. Tanto la dosis como la duración del tratamiento deben ser aprobadas por un médico experto.
En el caso de las personas cuya condición es grave, es posible que el tratamiento se deba mantener de por vida. En estos casos, luego de una evaluación médica completa del médico, el profesional de la salud debe prescribir la cantidad y la frecuencia de las dosis de vitamina D. También recomendará la exposición al sol, en horas convenientes.
En personas con déficit moderado o bajo
En el caso de las personas que presenten déficit moderado de vitamina D, se pueden tomar medidas no tan radicales. La inclusión de alimentos con alto contenido de esta vitamina en la dieta hará que el cuerpo pueda asimilarla mejor. La dosis diaria debe ser mayor a la normal, para lograr recuperar los niveles óptimos.
También se pueden recomendar suplementos que permitan absorber una mayor cantidad en menos tiempo. Por último, es necesaria la exposición al sol para que, a través de la piel, se pueda obtener la vitamina. Todas estas medidas afectarán de manera positiva en la recuperación del cuerpo.
Como detalle adicional debemos destacar que, si bien es cierto el déficit de vitamina D es peligroso para el cuerpo, el exceso de esta también lo es. Es por eso que se requiere la participación de un profesional de la salud en la evaluación. De esa manera se evitará el riesgo de consumir una cantidad mayor a la que el organismo necesita.
La vitamina D es un mineral muy valioso para el organismo. Sea cual sea nuestro estado de salud, es importante consumirlo con frecuencia. Así se fortalecerá todo el cuerpo.