Actualizado el 23 de octubre de 2022 por Carlos José Belmonte López
Las vitaminas son esenciales para la vida. Algunas permiten que se efectúen de manera adecuada los diferentes procesos del organismo. Otras ayudan a absorber mejor los nutrientes de los alimentos, entre otras funciones. Una de estas vitaminas es la tiamina, o B1.
En este artículo veremos qué es exactamente esta vitamina, cuál es su función dentro del cuerpo y en qué alimentos se puede encontrar.
¿Qué es la tiamina?
La tiamina es una de las muchas vitaminas que conforman el complejo B. Se trata de un elemento que se disuelve al entrar en contacto con el agua. La función de todas las vitaminas B es contribuir a la realización eficaz de los procesos químicos del organismo.
Esta vitamina permite que el cuerpo asimile mejor el piruvato, un componente esencial para muchos de los procesos químicos del cuerpo. Gracias a esto, es posible la contracción muscular así como la comunicación por señales nerviosas. Dicho de otra forma, ayuda a la buena interacción entre el cerebro y los músculos.
La tiamina es un compuesto químico. Resulta de la combinación entre carbono, hidrógeno, nitrógeno, oxígeno y azufre.
Para el año 1910 se descubrió este compuesto químico en los granos de arroz. En ese momento se le llamó ácido abérico. Para el año 1926 dos científicos pudieron separar la tiamina del arroz y la nombraron aneurina. Pero, no fue sino 9 años después cuando se logró conocer todos los detalles de esta vitamina, incluyendo su composición química.
¿Cómo influye en el cuerpo la tiamina?
La función principal de la tiamina está relacionada con el metabolismo. Según estudios en este campo, se ha determinado que cuando se trata de carbohidratos, esta vitamina interviene en mayor medida. También tiene participación en la asimilación del cuerpo de las grasas y demás nutrientes presentes en los alimentos.
Al ingresar al organismo es absorbida por el intestino delgado. Cuando la cantidad de tiamina en el cuerpo es la adecuada, el cuerpo puede desarrollarse de manera correcta, sobre todo a nivel muscular. Los diferentes sistemas, cardiovascular, nervioso y digestivo también se ven favorecidos con la ingesta adecuada de vitamina B1.
Para el año 2007, se comprobó la relación entre el consumo adecuado de tiamina con una menor aparición de algunas enfermedades. Entre estas la diabetes, causada por un aumento considerable de la glucosa. La vitamina B1 ayuda a mantener protegidas las células de este y otros componentes. Todo esto evita que se produzcan muchas enfermedades.
Efectos en el cuerpo por déficit de tiamina
Dado que el cuerpo necesita de las vitaminas para casi cualquier proceso químico, la falta de una de ellas, como la tiamina, puede causar varios efectos negativos. En este caso particular, la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos señala los siguientes.
Cansancio
La fatiga causada por la deficiencia de tiamina no se trata de cansancio común. Es una forma de fatiga, o debilitamiento del cuerpo, que puede imposibilitar a la persona realizar actividades físicas sencillas. Requiere de atención médica a fin de poder tener una recuperación completa.
Problemas mentales
Al no tener la cantidad necesaria de tiamina, no se pueden absorber los nutrientes necesarios, especialmente para la buena comunicación neuronal. Por eso, se pueden experimentar episodios psicóticos. Incluso las neuronas que cumplen la función de transmitir la información del cerebro a los músculos pueden sufrir daños irreparables.
Enfermedades
En caso de no tener la cantidad necesaria de tiamina en el cuerpo, lo cual causa un desequilibrio en el metabolismo, pueden presentarse diarreas, afecciones cardiacas como taquicardia o dilatación y hasta puede llevar a la pérdida considerable de peso.
Recomendaciones al usar tiamina
La recomendación principal relacionada con la tiamina es consumir esta vitamina siempre. La cantidad recomendada varía dependiendo de la edad de la persona. Aunque se trata de una organización dedicada principalmente a la salud de los niños, la Asociación Española de Pediatría señala la dosis diaria para todas las edades.
- Menores de seis meses. El máximo es de 0,2 miligramos.
- Menores de 1 año. La cantidad aumenta a 0,3 mg.
- Menores de 3 años. Deben consumir 0,5 mg.
- Menores de 8 años. No deben superar los 0,6 mg.
- Menores de 13 años. 0,9 mg.
- 14 años o más. En el caso de los hombres la ingesta es de 1,2 mg. Las mujeres deben consumir entre 1 y 1,1 mg por día.
- Embarazadas. Tanto para las embarazadas, como para quienes están en periodo de lactancia, la cantidad recomendada es de 1,4 mg.
Todas son cantidades muy pequeñas. Eso quiere decir que basta con incluir en la dieta los alimentos que contienen tiamina. También, si así lo considera necesario el especialista en salud debido al déficit de esta, se puede consumir vitamina B1 en cantidades mayores a las ya mencionadas.
Alimentos ricos en vitamina B1 o tiamina
Es posible encontrar vitamina B1 en diferentes alimentos. Incorporarlos en la dieta es fundamental para que el cuerpo pueda funcionar de manera adecuada. A continuación veremos los alimentos que contienen tiamina en mayor cantidad.
- Integrales. Pan, cereales, arroz, tanto en su presentación normal como enriquecido.
- Carnes. Tanto de res como de cerdo.
- Pescado. La mayor concentración se encuentra en la trucha y el atún.
- Huevos. Es de los alimentos que más tiamina contiene.
- Legumbres. En este punto también debemos incluir las arvejas como fuente importante de tiamina.
- Frutos secos. Todos contienen cierta cantidad de tiamina, pero resaltan las nueces.
- Vísceras. Incluye el riñón, el hígado y corazón.
En el caso de otros alimentos sí contienen tiamina pero en una concentración muy baja. Tal es el caso de los derivados de la leche, las verduras y las frutas. Por tal razón, la Asociación Española de Pediatría señala que, en caso de buscar aumentar la cantidad de vitamina B1 en el cuerpo, se deben consumir grandes cantidades de estos alimentos.
Por ahora, no se ha comprobado ningún efecto secundario relacionado con la ingesta excesiva de tiamina. Sin embargo, los expertos en salud recomiendan evaluar la condición de salud antes de decidir consumir vitamina B1 en altas dosis.